Quienes crecieron en los 90 seguramente recordarán a programas. Estas son las series más raras de Nickelodeon.
Bob Esponja
Bob Esponja es reconocida por su estilo único y su humor absurdo. La serie ha ganado popularidad gracias a su enfoque cómico y surrealista, con situaciones extravagantes y personajes peculiares que narran las divertidas aventuras de Bob Esponja y sus amigos en Fondo de Bikini.
A pesar de ser un programa dirigido principalmente a un público infantil y de contar con historias que a menudo eran simples, la serie incluye referencias culturales profundas, como Salvador Dalí, y bromas explícitas, a veces de índole sexual. También era común ver a los personajes haciendo graciosas expresiones faciales. Sin embargo, es la misma rareza de los episodios lo que le ha dado un lugar especial en el corazón de muchos espectadores, incluso perdurando en la cultura de los memes.
KaBlam!
A diferencia de otras series animadas, KaBlam! era un programa de variedades que presentaba varios segmentos cortos, cada uno con su propia trama y estilo de animación. Entre los más populares estaba “Prometheus y Bob”, una animación de plastilina sobre un extraterrestre intentando enseñarle a un hombre de las cavernas, y “La Liga de la Acción”, que presentaba a un grupo de muñecos de acción en situaciones cómicas y caóticas.
Presentado por dos personajes animados, Henry y June, KaBlam! se apartaba de la narrativa lineal convencional y adoptaba un enfoque más experimental incluso integrando un humor irreverente que era inusual en las series animadas infantiles.
Invasor Zim
Invasor Zim es probablemente la serie más oscura que pasó por Nickelodeon. La trama se centra en un extraterrestre llamado Zim que, de manera accidental, llega a la Tierra mientras sus superiores intentan deshacerse de él en su planeta natal. Si bien la serie estaba destinada a un público juvenil, abordó temas como la invasión alienígena, la incompetencia del protagonista y la interacción con humanos de una manera que rompía con las convenciones típicas de las caricaturas dirigidas a esa audiencia.
La caricatura estaba repleta de personajes excéntricos, humor negro y hasta escenas grotescas. Siempre se sumergía de lleno en la violencia, la oscuridad y la pura extravagancia para presentar sus chistes y momentos más perturbadores.
La Vida Moderna de Rocko
Varias series infantiles lograron integrar chistes sutiles para adultos, pero La Vida Moderna de Rocko fue un paso más allá al presentar también episodios enteros orientados a un público adulto. La serie trataba temas y situaciones más maduras, sorprendiendo incluso a los mayores con tramas y elementos que se desviaban hacia lo surrealista.
Centrada en un tímido y nervioso wallaby y sus mejores amigos (un novillo relajado y una tortuga histérica), el programa tomó decisiones audaces al presentar episodios que abordan temas como cultos, recuperación de adicciones, muerte, prisión e incluso el infierno, dirigido por un siniestro personaje llamado Duraznito.
Ren y Stimpy
Ren y Stimpy es la serie más desconcertante que ha aparecido en Nickelodeon. Este viaje delirante y alucinógeno se centra en las aventuras de un chihuahua estresado y un adorable gato gordo. Sus episodios, de tono surrealista y grotesco, contaban con personajes y expresiones faciales extremas que se desviaban de la norma, como se puede observar en el episodio “Hombre tostadas en polvo”, con un humor tan absurdo que resulta imposible pasar por alto.
La serie se aventuró en temas oscuros y situaciones inusuales, añadiendo elementos perturbadores y humor negro, lo que lo hizo destacar entre las otras caricaturas “para niños”. En realidad, el programa tiene más en común con el tipo de programación vista en el clásico bloque nocturno de Adult Swim que con cualquier cosa relacionada con Nickelodeon. De cualquier forma, por su contenido demente, violento y vulgar, Ren y Stimpy han dejado una huella imborrable en la historia de la animación.
